El relicario del Lignum Crucis en Santo Toribio será restaurado


El relicario que contiene la reliquia del Lignum Crucis, que se guarda y se venera en el monasterio de Santo Toribio de Liébana (Cantabria), será restaurado para proceder a su limpieza y mejorar su conservación, así como para asegurar algunas piezas que se movían de su estructura.
Los trabajos artesanales se realizarán en un taller de orfebrería especializado en obras y reliquias religiosas. La última actuación que se realizó en esta estructura que alberga el Lignum Crucis, data del año 1972.
Según ha informado el Obispado, en la mañana de del pasado viernes 9, se procedió a sacar la reliquia, en un acto solemne del que también quedó constancia notarial y gráfica, dada la relevancia de la reliquia y de su carácter sagrado.
En la apertura del relicario, estuvieron presentes el Vicario General de la Diócesis de Santander, P. Manuel Herrero; la notaria de Potes, María José Pérez, que levantó acta; el Guardián del monasterio, el padre franciscano, Juan Manuel Núñez y el arcipreste de Liébana y párroco de Potes, Elías Hoyal.
Asimismo, participó en el acto el presidente de la Cofradía de la Santísima Cruz, Manuel Bulnes, acompañado de la vocal de la Junta Directiva, Nieves Rodríguez.
Durante el tiempo que el relicario que contiene el Lignum Crucis esté fuera del monasterio, que está previsto sea hasta el próximo mes de febrero, no se mostrará a los fieles la reliquia, que el Obispado recuerda que "es el mayor trozo de la cruz donde murió Cristo que se conserva en el mundo".
Según la tradición, la reliquia llegó al monasterio alrededor del siglo IX para preservarla de la invasión musulmana.
Los relicarios que han guardado la cruz, ha sufrido con el paso de los años reformas muy importantes en los años 1801, 1906, y 1938. Durante la guerra civil española las tropas republicanas llevaron el relicario, que después se recuperó, según relata el Obispado. La última restauración tuvo lugar el 14 de febrero de 1972.

Comentarios